Me hundía, y sin avisar apareciste vos. Cuando pensaba que todo iba a seguir igual, que las cosas no iban a cambiar, me transformaste, me diste alegría, me diste ganas de seguir, me enseñaste a “amar” y te amé como a nada en el mundo.
sábado, 29 de agosto de 2009
Me hundía, y sin avisar apareciste vos. Cuando pensaba que todo iba a seguir igual, que las cosas no iban a cambiar, me transformaste, me diste alegría, me diste ganas de seguir, me enseñaste a “amar” y te amé como a nada en el mundo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario